Para el próximo presupuesto a largo plazo de la UE (2021-2027), la Comisión propone la creación de un Programa de Apoyo a las Reformas y de una Función Europea de Estabilización de las Inversiones. Ambas propuestas forman parte de una agenda más amplia para profundizar en la Unión Económica y Monetaria europea y hacer uso del presupuesto de la UE para reforzar el funcionamiento y la resiliencia de las economías interdependientes de nuestros países.
Las propuestas combinan los principios fundamentales de solidaridad y responsabilidad a todos los niveles y dan cumplimiento a los compromisos asumidos por el presidente Juncker en su Discurso del Estado de la Unión 2017. También se basan en las ideas que figuran en el Informe de los cinco presidentes de junio de 2015, el documento de reflexión de mayo de 2017 y la hoja de ruta de la Comisión para profundizar en la Unión Económica y Monetaria europea del pasado mes de diciembre, con tres principios centrales: unidad, eficiencia y responsabilidad democrática. Las propuestas de hoy asentarán firmemente la zona del euro en el presupuesto a largo plazo de la Unión.
El Programa de Apoyo a las Reformas ofrecerá apoyo a las reformas prioritarias en todos los Estados miembros de la UE, con un presupuesto global de 25 000 millones de euros. Abarca tres elementos: un Instrumento Operativo de Reforma para prestar apoyo financiero a las reformas; un Instrumento de Apoyo Técnico para ofrecer y compartir conocimientos técnicos; y un Instrumento de Convergencia para los Estados miembros en vías de adoptar el euro.
La Función Europea de Estabilización de las Inversiones contribuirá a la estabilización de los niveles de inversión pública y facilitará la rápida recuperación económica en caso de perturbaciones económicas importantes en los Estados miembros de la zona del euro y en los que participen en el mecanismo europeo de tipos de cambio (MTC II). Esta Función complementará la función de los estabilizadores automáticos nacionales existentes. Con sujeción a criterios estrictos acordes con políticas macroeconómicas y fiscales sólidas, podrán movilizarse rápidamente préstamos por un importe máximo de 30 000 millones de euros, junto con una bonificación de intereses para cubrir su coste. (RAPID, IP/18/3972, 31.5.2018)